Gratitud y despedida al sacerdote don Francisco Vañó,
´´Xesco´´
El señor Arzobispo de Valencia, don Antonio cardenal
Cañizares, ha tenido a bien nombrar a don Francisco José Vañó ´´Xesco´´ Subdelegado
Episcopal de Enseñanza y Pastoral Educativa y por tanto se traslada a Valencia
a desempeñar su nuevo ministerio.
Xesco hasta ahora y a lo largo de diez años ha sido vicario
parroquial de San José de Ontinyent, ayudando en las tareas pastorales y
litúrgicas a don José María Payá durante nueve años y en este último a don
Rafael Sala, que es el actual párroco.
Su despedida oficial como pastor de esta comunidad
parroquial será el sábado 31 de agosto a las 20 horas en la iglesia de San
José, donde celebrará su última misa como cura de la parroquia.
Nacido en la querida población de Bocairent, a Xesco lo
conocemos como hombre sencillo y cercano, de amplia sonrisa, al que le gusta
compartir los afanes de la vida. En su etapa por Ontinyent ha sido delegado de
juventud del arciprestazgo La Purísima, pues los jóvenes han sido siempre una
gran inquietud para él, afán que le ha caracterizado en su labor pastoral en
tres vertientes:
La primera, en su parroquia de San José, cuidando,
trabajando y rezando por tanto niño y joven del colegio, de la catequesis, del junior
o de la confirmación. En segundo lugar,
con la juventud mayor de edad, organizando encuentros de oración y acogida en
cada tiempo litúrgico: adviento, navidad, pascua y pentecostés. Y en tercer
lugar, acompañando a los profesores y alumnos de religión, creando espacios y
tiempos para la vivencia y el encuentro entre ellos y con el Señor.
A Xesco lo conocemos enfrascado siempre en actividades
juveniles y de niños, como convivencias, campamentos, encuentros, reuniones y
celebraciones. Su gran preocupación por los peligros y dificultades que tienen los
jóvenes en la actualidad le ha llevado a trasladar a sus homilías y
predicaciones la inquietud para que entre todos cuidemos el futuro de nuestras
comunidades, que son los mismos jóvenes. La misa del sábado a las seis repleta
de niños del junior o la de los domingos a las doce con los jóvenes de la
confirmación y juveniles son una muestra de ello, enseñando el evangelio,
mostrando a Jesús como referente de vida y predicando la salvación a través de
los más pequeños y a la vez los preferidos del Señor.
Claro, una de sus debilidades ha sido y es la preferencia
por atender siempre en primer lugar a los niños del doble amor, a los cuales ha
puesto en primera fila, les ha concedido el primer saludo y no les ha faltado
su visita, sus juegos y el compartir la amistad.
Si san Blas y san Agustín han sido ejemplo en el inicio de
su sacerdocio, estoy seguro que san José ha sido el ejemplo de padre que cuida
a Jesucristo y también a su madre María. Porque Xesco es también un sacerdote
muy mariano, celebrando siempre y fervorosamente todas sus festividades, en
especial, la Mare de Déu d´Agres en septiembre y la Purísima Concepción en
diciembre.
Hay que recordar que todo sacerdote tiene el encargo
misionero de anunciar el evangelio a todas las gentes y por eso cambia de
comunidad a la que servir. En este caso, a Xesco se le confía otra comunidad
parroquial y toda la comunidad educativa diocesana como su nuevo rebaño al que
apacentar y ayudar en el trabajo y el peregrinar de cada día.
Xesco, te deseamos lo mejor, que son muchos frutos
pastorales anunciando el evangelio, acompañando a educadores y jóvenes y
acrecentando tu ministerio sacerdotal en favor de los pobres y necesitados.
Esta parroquia de San José siempre será tu casa y tu iglesia, date por seguro
que rezaremos por ti y por tu ministerio y también por el bien de la Santa
Iglesia. Gracias Xesco y acuérdate siempre de nosotros.
Vicente Revert Calabuig