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lunes, 2 de septiembre de 2019

GRACIAS MIL, siempre unidos


Gratitud y despedida al sacerdote don Francisco Vañó, ´´Xesco´´


El señor Arzobispo de Valencia, don Antonio cardenal Cañizares, ha tenido a bien nombrar a don Francisco José Vañó ´´Xesco´´ Subdelegado Episcopal de Enseñanza y Pastoral Educativa y por tanto se traslada a Valencia a desempeñar su nuevo ministerio.
Xesco hasta ahora y a lo largo de diez años ha sido vicario parroquial de San José de Ontinyent, ayudando en las tareas pastorales y litúrgicas a don José María Payá durante nueve años y en este último a don Rafael Sala, que es el actual párroco.
Su despedida oficial como pastor de esta comunidad parroquial será el sábado 31 de agosto a las 20 horas en la iglesia de San José, donde celebrará su última misa como cura de la parroquia.
Nacido en la querida población de Bocairent, a Xesco lo conocemos como hombre sencillo y cercano, de amplia sonrisa, al que le gusta compartir los afanes de la vida. En su etapa por Ontinyent ha sido delegado de juventud del arciprestazgo La Purísima, pues los jóvenes han sido siempre una gran inquietud para él, afán que le ha caracterizado en su labor pastoral en tres vertientes:
La primera, en su parroquia de San José, cuidando, trabajando y rezando por tanto niño y joven del colegio, de la catequesis, del junior o de la confirmación.  En segundo lugar, con la juventud mayor de edad, organizando encuentros de oración y acogida en cada tiempo litúrgico: adviento, navidad, pascua y pentecostés. Y en tercer lugar, acompañando a los profesores y alumnos de religión, creando espacios y tiempos para la vivencia y el encuentro entre ellos y con el Señor.
A Xesco lo conocemos enfrascado siempre en actividades juveniles y de niños, como convivencias, campamentos, encuentros, reuniones y celebraciones. Su gran preocupación por los peligros y dificultades que tienen los jóvenes en la actualidad le ha llevado a trasladar a sus homilías y predicaciones la inquietud para que entre todos cuidemos el futuro de nuestras comunidades, que son los mismos jóvenes. La misa del sábado a las seis repleta de niños del junior o la de los domingos a las doce con los jóvenes de la confirmación y juveniles son una muestra de ello, enseñando el evangelio, mostrando a Jesús como referente de vida y predicando la salvación a través de los más pequeños y a la vez los preferidos del Señor.
Claro, una de sus debilidades ha sido y es la preferencia por atender siempre en primer lugar a los niños del doble amor, a los cuales ha puesto en primera fila, les ha concedido el primer saludo y no les ha faltado su visita, sus juegos y el compartir la amistad.
Si san Blas y san Agustín han sido ejemplo en el inicio de su sacerdocio, estoy seguro que san José ha sido el ejemplo de padre que cuida a Jesucristo y también a su madre María. Porque Xesco es también un sacerdote muy mariano, celebrando siempre y fervorosamente todas sus festividades, en especial, la Mare de Déu d´Agres en septiembre y la Purísima Concepción en diciembre.
Hay que recordar que todo sacerdote tiene el encargo misionero de anunciar el evangelio a todas las gentes y por eso cambia de comunidad a la que servir. En este caso, a Xesco se le confía otra comunidad parroquial y toda la comunidad educativa diocesana como su nuevo rebaño al que apacentar y ayudar en el trabajo y el peregrinar de cada día.
Xesco, te deseamos lo mejor, que son muchos frutos pastorales anunciando el evangelio, acompañando a educadores y jóvenes y acrecentando tu ministerio sacerdotal en favor de los pobres y necesitados. Esta parroquia de San José siempre será tu casa y tu iglesia, date por seguro que rezaremos por ti y por tu ministerio y también por el bien de la Santa Iglesia. Gracias Xesco y acuérdate siempre de nosotros.

Vicente Revert Calabuig